Revista Minería, 05 de Mayo de 2017
El uso de PH es inocuo para el medio ambiente, por lo que se reconoce como una práctica de la llamada “química verde”. Con múltiples aplicaciones, en minería este elemento habilita una serie de soluciones sustentables, tales como el tratamiento y control de gases.
Sustentabilidad en sus distintas dimensiones
Eliminación de gases SO2 en Codelco Ventanas con peróxido de hidrógeno.
Por otra parte, tecnologías limpias o verdes, además de reducir el impacto medioambiental, demuestran cada vez más ser también rentables económicamente. Es el caso de tecnologías como la biolixiviación, la extracción hidrometalúrgica con cero o mínima emisión de ácidos o sulfuros, o las energías verdes, que ofrecen una solución económica y amigable para el ecosistema.
En tanto, cómo un determinado proyecto genera impacto en la comunidad y compensa apropiadamente a los distintos involucrados, permitirá sustentar socialmente el negocio minero en el tiempo. Por lo demás, un cátodo de cobre o una barra de oro o molibdeno sustentable es un producto que tiene valor agregado y por el que existe mayor disposición a pago en los mercados de destino.
El Peróxido de hidrógeno (PH)
Tecnologías limpias o verdes, además de reducir el impacto medioambiental, demuestran cada vez más ser también rentables económicamente.
La versatilidad del PH es, por decir lo menos, asombrosa, con múltiples aplicaciones, tales como propelente de cohetes, blanqueo de papel y celulosa, blanqueo de fibras textiles, desinfección y aseo industrial, formulación de detergentes, tinturas para el cabello, tratamiento y sanitización de aguas y riles, control de gases y olores, formulación de compuestos químicos, desinfección de envases para la industria de alimentos, entre otras.Recientemente investigadores de Harvard desarrollaron el primer robot enteramente blando o “soft” (sin componentes rígidos), que en vez de baterías y circuitos eléctricos, emplea el PH como combustible para operar un sistema neumático que le permite moverse, abriendo nuevas posibilidades al mundo de la biorobótica y aplicaciones en ambientes de alto dinamismo e incerteza.
Uso en minería
Para la industria minera, el PH habilita una serie de soluciones sustentables, tales como el tratamiento y control de gases. Es el caso, por ejemplo, de la planta de gases de cola de Codelco Ventanas, en la cual el dióxido de azufre (SO2) es capturado efectivamente con tecnología que usa peróxido, disminuyendo las emisiones a niveles que cumplen ampliamente con la normativa vigente.
Los efluentes contaminantes de procesos mineros también son alimento muy apetecido para el voraz peróxido de hidrógeno. Como se ve en el tratamiento de los polvos de fundición provenientes de Chuquicamata, que realiza la filial de Codelco Ecometales, usando el proceso triple A, una innovadora tecnología propietaria que emplea el peróxido para abatir arsénico de modo limpio y sustentable.
Otras soluciones actualmente operando o en fase de desarrollo en nuestro país incluyen el tratamiento de efluentes de lixiviación del oro y del molibdeno, en los cuales sustancias contaminantes como el arsénico, ciaunuro y sulfuros, entre otros, son abatidos eficientemente con mínimo impacto en el medio ambiente.
Pero las soluciones para la minería no se limitan al tratamiento de residuos, como puede apreciarse en la minería no metálica del yodo en Chile. Esta industria, líder a nivel mundial, incorporó hace más de una década a su proceso productivo el PH como reactivo químico que, además de no presentar impurezas que puedan contaminar el producto final, provee oxidación limpia y competitiva en costos. Algo similar podría ocurrir en el futuro cercano con la minería del cobre y del oro, si nuevas tecnologías basadas en este compuesto, aplicadas a los procesos hidrometalúrgicos, demuestran ser económicamente viables.